Cuando una persona, de entre 0 y 99 años siente rabia, se activa la amígdala, lo que llamamos el cerebro emocional, que va a tomar el control haciendo que nos desconectemos de nuestro centro de raciocinio, pensamiento, etc, es decir de nuestra corteza prefrontal.
Sobre este tema tenemos un episodio entero: El Cerebro en la palma de la mano. Como resumen, decir que este cerebro emocional, la amígdala, tiene tres características importantes: es automática, involuntaria e inconsciente. Es decir, no podemos interferir en esta reacción, aunque sí podemos aprender a manejarla. Y hablo de reacción y no de respuesta, desde la amígdala, nos preparamos para el ataque, la huida o la parálisis. No podemos pensar, razonar ni decidir.
Vamos a ver los tipos de rabietas que pueden darse, las causas y lo que podemos hacer, pero antes …